EL RETO GLOBAL QUE CELEBRA LA ESENCIA DE VALENCIA
El 20 de septiembre de 2024, Valencia se convirtió nuevamente en el epicentro mundial de la paella, al acoger
la quinta edición del World Paella Day Cup. Con doce cocineros internacionales compitiendo por el título al
mejor chef de paella del mundo, el certamen no fue solo una competencia culinaria, sino una celebración de la
riqueza cultural, social y gastronómica de la ciudad que vio nacer este icónico plato.
UNA CELEBRACIÓN GLOBAL EN TORNO A LA PAELLA
El lema de esta edición, “Paella: un idioma universal”, fue más que una simple frase. Reflejaba la capacidad de
este plato para unir culturas, técnicas y tradiciones diversas, transformando la paella en un símbolo que
trasciende fronteras. Desde Japón hasta Colombia, pasando por Irlanda y China, los doce chefs finalistas no solo
trajeron sus habilidades culinarias, sino también una interpretación personal del plato que representa a Valencia
y su espíritu. Lo que hace al World Paella Day Cup tan único no es solo la calidad técnica de los cocineros, sino
su capacidad para captar la esencia de la paella: un plato que se cocina lentamente, que nace del respeto a los
ingredientes locales y que se disfruta en compañía, como una expresión de unión y celebración. En esta edición,
los participantes demostraron cómo un plato de arroz puede convertirse en un vehículo de conexión entre
culturas y personas.
LA ESENCIA DE VALENCIA EN CADA GRANO DE ARROZ
Más allá del concurso, el World Paella Day es una oportunidad para sumergirse en la cultura valenciana. Antes
de la competición, los chefs participaron en una serie de actividades formativas que les llevaron a conocer los
lugares clave que abastecen de productos frescos a la ciudad. Visitaron la Albufera, la huerta, la lonja de
pescados y los mercados municipales, descubriendo de primera mano la calidad de los ingredientes que hacen
de la paella un plato extraordinario. Estos días previos permitieron a los cocineros comprender el verdadero
significado de cocinar una paella: no es solo técnica, es historia, es tierra, es tradición.
En cada visita, los chefs y sus equipos se encontraron con la cultura viva de la dieta mediterránea, una forma de
vida que se refleja en cada producto local y en cada receta. Esta inmersión completa les permitió comprender
la esencia de la paella, no solo como plato, sino como un reflejo de la sociedad valenciana, sus costumbres y su
respeto por los recursos naturales.
EL DESAFÍO: DOCE COCINEROS, UNA SOLA COPA
Los cocineros seleccionados para esta edición procedían de diversas partes del mundo: John Kenwright
(Irlanda), Jordane Estevez (Francia), Giuseppe Bardelli (Italia), Irina Cristina Turcu (Rumanía), Nick Todorov
(Bulgaria), Miguel Ángel Moreno (Colombia), Jorge Alberto Castellanos Rodríguez (México), Franklin Javier
Dasso Seminario (Perú), Joe Padilla (Puerto Rico), Avinash Agarwal (Emiratos Árabes Unidos), Yuqin Yang
(China) y Shingo Hinokio (Japón). Todos ellos tuvieron que enfrentarse a un jurado experto compuesto por
figuras reconocidas en el mundo de la gastronomía.
El reto fue mucho más que seguir una receta tradicional. El jurado evaluó aspectos que iban desde el aroma y
el sabor, hasta el punto exacto de cocción del arroz y la creación del socarrat, esa capa dorada y crujiente en el
fondo de la paella que muchos consideran el alma del plato. Sin embargo, lo que hizo destacar a los finalistas
fue su capacidad para integrar sus propios estilos y técnicas, manteniendo al mismo tiempo la autenticidad del
plato valenciano.
UNA FINAL INOLVIDABLE
De los doce competidores, solo seis lograron llegar a la fase final: los representantes de Rumanía, China, México,
Japón, Colombia y Puerto Rico. Tras una reñida competencia, el Chef Joe Padilla de Puerto Rico se llevó el primer
premio, un trofeo diseñado por el afamado artista fallero José Luis Platero. Miguel Ángel Castro, de Colombia,
ocupó el segundo lugar, mientras que Shingo Hinokio, de Japón, se hizo con el tercer puesto.
Este resultado no solo premió la habilidad técnica, sino también la capacidad de los chefs para conectar con la
cultura valenciana. Cada uno de los finalistas aportó algo único, pero todos compartieron una comprensión
profunda del valor social y gastronómico de la paella, algo que los jueces valoraron especialmente.
VALENCIA: MÁS QUE LA CUNA DE LA PAELLA
El World Paella Day es más que un concurso, es una plataforma para mostrar al mundo la importancia de la
paella como símbolo de la identidad valenciana. Paula Llobet, concejala de turismo del ayuntamiento, destacó
cómo el certamen refleja el compromiso de Valencia con la sostenibilidad y su papel como Capital Verde
Europea 2024. La elección de La Pérgola en La Marina del Puerto, como escenario del evento no fue casual, ya
que este espacio representa la conexión de Valencia con el mar y su clima mediterráneo, elementos esenciales
para entender la cultura local.
El evento contó con el apoyo de instituciones como la Fundación Visit Valencia, Turisme Comunitat Valenciana,
y la Diputació de València, que ven en este tipo de iniciativas una oportunidad para consolidar a Valencia como
un destino gastronómico de referencia a nivel internacional. Valencia no solo es la cuna de la paella, es también
un ejemplo de cómo la gastronomía puede ser un motor de desarrollo sostenible, un punto de encuentro entre
culturas y una forma de vida que valora la calidad y el respeto por el entorno.
LA PAELLA COMO LEGADO CULTURAL
El World Paella Day Cup 2024 dejó claro que la paella es mucho más que un plato. Es un reflejo de la historia,
la tradición y el espíritu de Valencia, un legado cultural que se transmite de generación en generación. Cada
edición de este certamen no solo premia la habilidad de los chefs, sino que reafirma el papel de la paella como
un símbolo universal de hospitalidad y celebración.
Para los participantes, es una oportunidad única de convertirse en embajadores de Valencia y su cultura. Al
regresar a sus países, llevan consigo no solo la perfección y el conocimiento de cómo cocinar una paella, sino
también el compromiso de compartir la historia y los valores de este plato icónico. Valencia, con su rica
gastronomía y su apuesta por la sostenibilidad, continúa siendo un referente global, y el World Paella Day Cup
es una prueba de ello.
Una crónica de Mª Luisa Martín Tejera
Fotos cedidas por la organización del certamen.