El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rías Baixas llevará a cabo nuevas estrategias de promoción internacional en distintos países, especialmente en los EEUU
El pasado 27 de julio, tenía lugar una mesa de trabajo en la sede del Consejo Regulador de las Rías Baixas para plantear el balance de actuación internacional. Allí, se reunieron una treintena de representantes de todas las bodegas de la región y Juan Gil de Araujo a la cabeza, como presidente de la institución.
Se analizaron los datos de este último año y se plantearon nuevos objetivos, especialmente en el ámbito del marketing, para promocionar los productos de la D.O. en el mundo. La responsable de este departamento, Eva Mínguez, expuso las distintas acciones acontecidas en relación a la exportación en países como Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Japón, Benelux y México, que según indicó «contaron con muy buena acogida».
Mínguez apuntó además que «durante este primer semestre de 2016 hemos desarrollado un completo programa de actividades , muchas de las cuales se centraron en la formación sobre los vinos de Rías Baixas y que se dirigían tanto a profesionales del sector como a consumidor final.»
Para el próximo año, se plantean nuevos objetivos: afianzar los mercados que en los que están consolidándose y potenciar las acciones en aquellas nuevas oportunidades que están surgiendo para la D.O. de Rías Baixas. Para conseguirlo, se llevarán a cabo acciones promocionales que den a conocer los vinos de la región enfocándose a un público amplio de prescriptores y también consumidores.
Plan de Promoción de Estados Unidos
El foco principal de la mesa fue para Estados Unidos, destino principal de las exportaciones de las Rias Baixas. Acudieron a esta cita tres representantes de la agencia encargada de la incursión en norteamérica: Helen Gregory, Megan Pisani y José Carlos Román.
En este plan participan 47 bodegas. El año pasado se registraron unas volumen de ventas de 2.084.955,49 litros de vino, que en términos económicos representan 11.210.255,67 euros.
La estrategia llevada a cabo combina acciones focalizadas especialmente en Nueva York y Chicago. La incorporación de embajadores en estas ciudades ha sido fundamental para dar a conocer los vinos de las Rias Baixas. Además, también se han desarrollado seminarios y catas-maridaje con profesionales del sector.
Como nuevos retos, de cara a 2017, se plantea como objetivo ampliar la comunidad de prescriptores y desestacionalizar el consumo de los vinos blancos, así como hacer resaltar la calidad de los mismo y hacerlos competir con los mejores del mundo.